Universidad de Ritsumeikan
Los Visualizers aportan un ambiente dinámico y espontáneo al aula
Desde la apertura del campus de Osaka Ibaraki (OIC) de la Universidad de Ritsumeikan en abril de 2015, los Visualizers se han ido incorporando progresivamente como equipamiento estándar en las aulas.
WolfVision conversó con el Sr. Kengo Kurashina, del Departamento de Sistemas de Información, Sección de Infraestructura Informática, quien ha sido responsable durante muchos años del diseño, la selección de equipos, la implementación y la operación de los sistemas audiovisuales en todos los campus. A través del uso de los Visualizers, compartió su visión sobre el diseño de aulas y el futuro de los entornos educativos.
Comentarios del profesorado
WolfVision (WV):
Han pasado ya diez años desde la apertura del campus de Osaka Ibaraki (OIC). Les agradecemos sinceramente por continuar implementando los Visualizers. Entendemos que usted mantiene reuniones periódicas con el profesorado para recopilar comentarios y resolver posibles incidencias. ¿Podría contarnos qué opinan los docentes que utilizan los Visualizers en sus clases?
Sr. Kurashina:
Algunos profesores comentan que, con la transición hacia entornos educativos sin papel, “las cámaras documentales ya no son necesarias”. Sin embargo, muchos siguen encontrándoles aplicaciones muy útiles. Por ejemplo, mostrar objetos reales como textos raros o artefactos en clase, enseñar notas escritas a mano con naturalidad, presentar hojas de trabajo elaboradas durante la clase o resolver ejercicios en tiempo real: todas estas son formas prácticas y muy valoradas de uso. Además, la posibilidad de capturar la imagen del Visualizer por USB y compartirla en alta calidad mediante software de videoconferencia también recibe valoraciones muy positivas.
El personal administrativo también aprecia poder proyectar documentos como los planos de asientos simplemente colocando páginas impresas bajo el Visualizer, sin necesidad de un ordenador. Usar un PC para mostrar datos puede implicar preocupaciones de seguridad, como dejar sesiones abiertas sin supervisión; en algunos casos, el papel resulta más fácil de gestionar.
Además, recibimos avisos casi inmediatos cada vez que un Visualizer presenta algún problema, lo cual demuestra lo integrados que están en las operaciones diarias. En el pasado, cuando se utilizaban sistemas basados en NTSC, a veces recibíamos comentarios sobre imágenes borrosas o diferencias de color. Pero en los últimos años, hemos conseguido ofrecer una calidad de imagen que cumple con las expectativas, sin que surjan ya ese tipo de observaciones.
Qué se espera de las aulas de aprendizaje activo
WolfVision (WV):
Con la creciente normalización de las clases a distancia y las reuniones virtuales, en WolfVision hemos observado un número cada vez mayor de casos en los que los Visualizers se utilizan como cámaras USB. Esperamos que su campo de aplicación siga ampliándose en consonancia con la evolución de las necesidades educativas. Hablando de tendencias, el concepto de “aprendizaje activo” ha cobrado protagonismo en los últimos años y hoy en día está ampliamente reconocido. Sr. Kurashina, ¿cómo imagina usted personalmente un aula de aprendizaje activo?
Sr. Kurashina:
Cada docente tiene su propio estilo de enseñanza, por lo que considero fundamental ofrecer flexibilidad y opciones, en lugar de imponer un formato fijo. En nuestros “Learning Studios” – aulas diseñadas específicamente para el aprendizaje activo – observamos una gran variedad de enfoques pedagógicos. En algunas clases, los estudiantes trabajan intensamente con sus portátiles; en otras, mantienen discusiones cercanas sin utilizar dispositivos electrónicos.
En estos entornos, los Visualizers también desempeñan múltiples funciones. Más allá de mostrar documentos, se utilizan para proyectar notas adhesivas, materiales recopilados durante trabajos de campo, o incluso imágenes en directo de personas cuando la cámara está orientada hacia delante. La característica clave de estas aulas es la flexibilidad: el mobiliario es móvil y hemos relajado las normas sobre la reconfiguración del espacio tras el uso, con el fin de garantizar mayor libertad operativa.
En cuanto al equipamiento, mientras que las aulas generales están equipadas con sistemas estandarizados para asegurar una experiencia uniforme, nuestros Learning Studios cuentan con una gama más amplia de herramientas. Estas pueden incluir tecnologías avanzadas o experimentales, pantallas móviles y configuraciones audiovisuales diversas.
Usando una metáfora: las aulas tradicionales ofrecen un “menú fijo”, mientras que las aulas de aprendizaje activo proponen un “buffet” con múltiples opciones. La idea central es que tanto docentes como estudiantes puedan elegir y configurar los recursos que mejor se adapten a sus necesidades específicas de enseñanza y aprendizaje.
El equilibrio entre lo digital y lo analógico
WolfVision (WV):
Su analogía entre las aulas tradicionales como un “menú fijo” y las aulas de aprendizaje activo como un “buffet” es una forma excelente y fácil de entender para explicar la diferencia. En cualquier caso, las aulas universitarias —especialmente en la educación superior— están compuestas por una combinación de herramientas digitales avanzadas y dispositivos analógicos simples. ¿Cuál es su perspectiva sobre el equilibrio entre tecnologías digitales y analógicas?
Sr. Kurashina:
El equilibrio ideal está en constante cambio, pero no hay duda de que la proporción de lo digital sigue aumentando. Dicho esto, aún existen muchos casos en los que los métodos manuales y analógicos resultan más eficientes. Nos enfocamos en áreas donde los usuarios no tengan que preocuparse por la tecnología, y donde sea posible reducir el cableado, la cantidad de dispositivos y los costos. Por eso, especialmente en los últimos años, hemos acelerado la digitalización —en particular, la transición hacia sistemas basados en IP— a nivel de hardware.
Existe el riesgo de que las herramientas analógicas caigan en desuso si no se adaptan a las tendencias actuales. Los Visualizers, aunque conservan ciertos aspectos analógicos, han evolucionado considerablemente en cuanto a calidad de imagen. Hoy en día, los Visualizers rivalizan con los smartphones en nitidez y rendimiento, superando con creces su función tradicional, lo que garantiza su vigencia y aceptación en el entorno educativo.
En cuanto a la digitalización relacionada con el uso de los equipos, avanzamos con cierta cautela. Por ejemplo, la función de compartir pantalla en conferencias web ha resultado muy eficaz para reducir los tiempos de transición entre presentadores y eliminar desventajas relacionadas con la ubicación en el aula. Por otro lado, en un entorno presencial, una presentación en vivo ofrece un tipo de tensión y experiencia de aprendizaje diferente: ver las reacciones del público en tiempo real cambia la dinámica. Incluso el simple hecho de oír tu propia voz amplificada en todo el aula genera una presencia y una intensidad únicas.
Cuando se trata de presentar materiales, creo que no todo debe digitalizarse por completo. La escritura a mano aporta una cierta espontaneidad y una atmósfera especial: el estilo de la caligrafía y la disposición visual pueden transmitir información más sutil. En una reciente sesión de trabajo, un profesor comentó que el uso intencionado de hojas de trabajo escritas a mano permitía incluir ilustraciones y formatos más legibles. Como resultado, las presentaciones fueron más ricas en contenido y más atractivas. Ese comentario me dio mucho ánimo y reafirmó el papel esencial del Visualizer en el aula.
WV:
Aprovechando al máximo las ventajas que ofrece la tecnología digital, ustedes mantienen al mismo tiempo una actitud prudente frente a la digitalización en las operaciones diarias, lo cual representa un equilibrio muy acertado. De hecho, las aulas que ustedes diseñan siempre se basan en el principio de que “cualquiera debe poder usarlas de forma fácil e inmediata”. A partir de esta base, integran funciones y experiencias innovadoras que reflejan las necesidades y propuestas del profesorado.
En el caso de los Visualizers, a menudo se pone el foco en su gran profundidad de campo y en la calidad de imagen ultraalta. Sin embargo, el verdadero valor está en su facilidad de uso: funcionamiento sin necesidad de ajustes de iluminación ni enfoque manual. Este concepto es fundamental en todos los modelos de WolfVision.
Ya sea en un entorno de aula tipo “menú fijo” o en una aula tipo “buffet”, esperamos que los Visualizers sigan siendo el ingrediente clave: capaces de realzar el valor de las presentaciones en tiempo real y de capturar la espontaneidad única del contenido escrito a mano.
Muchas gracias por dedicar su tiempo a esta entrevista.
Resumen de implementación
Instalaciones en:
Todos los campus de la Universidad de Ritsumeikan
(Kinugasa, Biwako-Kusatsu, Osaka Ibaraki, Suzaku, Tokio, Osaka Umeda)
Universidad Ritsumeikan de Asia y el Pacífico (APU)
Más de 600 unidades instaladas
Modelos en uso:
VZ-8.UHD (modelo actual)
VZ-8light4 (descontinuado)